La correa de accesorios es una cinta que aprovecha el movimiento de rotación del cigüeñal para mover diversos sistemas del vehículo, como la bomba de agua, la dirección asistida o el alternador. Este componente recibe varios nombres, por lo que es posible que en tu país se conozca como ‘correa serpentina’, ‘correa del ventilador’, ‘correa del alternador’ o ‘correa de transmisión’.
Para su correcto funcionamiento, este elemento requiere mantenimiento periódico. Básicamente, es necesario reemplazar la correa por una nueva cada cierto número de kilómetros. De lo contrario, podría romperse y desencadenar numerosos problemas en el motor. La rotura de la correa de accesorios no es tan grave como la rotura de la correa de distribución, pero no por ello deberíamos confiarnos. Si la correa serpentina se rompe con el coche en movimiento, con total seguridad tendremos que parar y llamar a una grúa.
¿Qué sucede cuando la correa de accesorios se rompe?
La correa de accesorios está construida para durar y no es propensa a fallar. Sin embargo, se desgasta con el tiempo y el uso. Cada coche tiene sus intervalos de sustitución, pero lo habitual es hacer este cambio junto a la correa de distribución y bomba de agua.
Si tu correa de accesorios se rompe mientras estás conduciendo, probablemente oirás algunos golpes en el compartimento del motor a medida que se desprende y comienza a golpear alrededor antes de caer. Dado que esta correa de transmisión alimenta varios sistemas esenciales del motor, esto es lo que sucederá si se rompe:
Pérdida de la dirección asistida
Si eres joven, es posible que nunca hayas visto lo absurdamente complicado que era mover un volante hace unas cuantas décadas. La razón por la que puedes mover con tantísima suavidad las ruedas de tu SUV de 2 toneladas es una maravilla de la ingeniería llamada ‘dirección asistida‘. Si la correa de accesorios se rompe, el sistema hidráulico dejará de hacer efecto, por lo que tendrás que hacer muchísima fuerza para poder girar el volante.
Este problema no será muy notable a altas velocidades. Sin embargo, cuanto más lento te muevas, más se reflejará en el volante el peso del vehículo. De hecho, como tengas que aparcar el coche en este estado, puedes ahorrarte ir al gimnasio por la tarde, porque vas a tener agujetas. Con esto sobre la mesa, sobra decir que a ningún conductor en su sano juicio quiere quedarse sin dirección asistida, especialmente ahora que los coches que están más de moda son bastante pesados.
Pérdida de los sistemas eléctricos del vehículo
La correa de accesorios interactúa con el alternador. El alternador alimenta todos los sistemas eléctricos del vehículo y recarga la batería del coche. Si la correa de accesorios se rompe, el alternador deja de generar energía eléctrica.
Si eso sucede, tus faros se atenuarán. La radio no funcionará y la batería se agotará en tiempo récord, pues pasará a ser la principal fuente de energía eléctrica del vehículo. La luz de advertencia de la batería también se encenderá porque tu batería no se estará cargando.
El aire acondicionado del coche también dejará de funcionar si esto ocurre, por suerte, podrás bajar las ventanillas siempre y cuando tengas batería. Mucha precaución si la rotura te pilla en carretera un día de lluvia. Antes de quedarte sin luces y sin limpiaparabrisas —y sin propulsión del motor—, es más sensato parar, llamar a una grúa y no jugársela.
La bomba de refrigerante deja de funcionar
Sin correa de accesorios, la bomba de refrigerante no puede hacer su trabajo. Como resultado, el motor comenzará a sobrecalentarse rápidamente.
El indicador de temperatura subirá a la zona roja y la luz de Check Engine se iluminará una vez que las temperaturas excedan los niveles seguros.
Algunos coches se librarán de este problema si es que tienen una bomba de agua accionada por la correa de distribución en lugar de la de accesorios. En cualquier caso, circular con el motor sobrecalentado no es nada recomendable, pues estaremos comprando papeletas para que el motor se gripe. Por suerte, en los coches modernos, el motor se apagará para garantizar su propia seguridad.
Motor en modo de emergencia
Esto es justo lo que veníamos hablando en el párrafo anterior. La ECU de tu coche es bastante inteligente. Tan pronto como detecte los fallos derivados de una correa de accesorios rota, limitará su actividad para no autodañarse. Por ese motivo, pasará a trabajar a un régimen mucho más seguro, limitando la potencia y marcando una bonita luz de ‘Check Engine’ o fallo motor en tu cuadro de luces.
¿Qué debo hacer si la correa de accesorios se rompe mientras estoy conduciendo?
Como ya te habrás imaginado con lo que hemos explicado en el bloque anterior, el coche no necesariamente se va a detener de inmediato. No obstante, deberías estacionar en un lugar seguro lo más pronto posible. La potencial dificultad en la dirección y el riesgo de sobrecalentamiento del motor del vehículo son más que suficientes motivos para parar y no asumir riesgos.
Una vez que te hayas detenido en un lugar seguro, llama a un mecánico o a la asistencia en carretera. Además, si la correa de accesorios del coche está colgando en el compartimento del motor, retírala antes de mover el vehículo a otro lugar para prevenir más daños.
¿Cuánto tiempo puedo circular con una correa de accesorios rota?
Hay un par de factores que influyen en la respuesta a esta pregunta, pero en promedio, tu coche debería ser capaz de funcionar entre 20 y 90 minutos, aunque con muchísimas dificultades.
El motor se sobrecalentará más rápido sin un sistema de refrigeración funcionando en un día caluroso, por lo que tu ventana de conducción es menor. Si hace frío y tu batería está completamente cargada, podrías ser capaz de mantener el motor de ese vehículo funcionando durante algo más de una hora, lo suficiente hasta que la batería se agote. Suficiente tiempo como para llegar a un sitio seguro o plantar el coche en un taller cercano.
Si te ves en esta tesitura, intenta apagar los sistemas electrónicos no esenciales para minimizar el drenaje de la batería.
¿Puede un coche arrancar con una correa de accesorios rota?
Sí, un vehículo puede arrancar con una correa serpentina rota, suponiendo que la batería esté completamente funcional. El motor de arranque y el sistema de encendido arrancarán el motor del coche para iniciar el proceso de combustión.
Sin embargo, no llegarás muy lejos. Los dos grandes limitantes serán lo que dure la batería, y lo que tarde el motor en sobrecalentarse y apagarse.
Síntomas de una correa del alternador dañada o en mal estado
La buena noticia es que la correa de accesorios muestra signos aparentes de desgaste mucho antes de que se rompa. Aquí hay un par de síntomas que debes tener en cuenta:
- Chirridos y grillos que proviene del compartimento del motor: este sonido agudo puede ser una señal de que la correa de accesorios está resbalando en las poleas, lo que significa que no está manteniendo una tensión adecuada o que está desgastada.
- Grietas, astillas y daños en la correa: estos son signos visibles de desgaste en la correa serpentina. Si se observan estos daños, es muy probable que la correa necesite ser reemplazada pronto para evitar una ruptura inminente.
- Fugas de fluido o mangueras con fugas: las fugas de fluido pueden indicar un problema con el tensor de la correa o con las mangueras conectadas a él. Si el fluido está goteando, el tensor puede no mantener la tensión adecuada en la correa, lo que podría llevar a un fallo prematuro de la misma.
- Problemas con la electrónica, dirección o sobrecalentamiento del motor: aunque estos síntomas son clave una vez la correa se ha roto, pueden aparecer del mismo modo si la correa está dañada.
Si notas cualquiera de estos problemas, no lo dejes pasar y llama a tu taller de confianza.
¿Puedo conducir con una correa serpentina desgastada?
Por poder, puedes, pero no es nada aconsejable. No hay razón para poner en riesgo tu vehículo y tu propia seguridad conduciendo con una correa de accesorios en mal estado. La falla de la correa puede ocurrir en cualquier momento, y las consecuencias pueden ser peligrosas.
La correa serpentina normalmente necesitará inspección y reemplazo alrededor de 100.000 a 150.000 kilómetros de uso. Ser proactivo acerca de conseguir que una correa vieja sea revisada puede prevenir la molestia y el peligro potencial de terminar con una correa rota.
Causas que hacen aceleran el desgaste de la correa de accesorios
Los problemas de la correa de accesorios son típicamente causados por uno o varios de estos factores:
- Exposición al calor y la fricción con el tiempo: la correa de accesorios, al estar en constante movimiento y estar expuesta a altas temperaturas en el compartimento del motor, se somete a desgaste por calor y fricción. Con el tiempo, esta exposición continuada puede causar el deterioro y posteriormente la rotura.
- Tensor de correa defectuoso: el tensor de la correa es esencial para mantener la tensión adecuada de la correa de accesorios. Si este componente está defectuoso, la correa puede deslizarse o incluso desprenderse completamente, provocando que los accesorios del motor dejen de funcionar.
- Desalineación de una polea: las poleas están diseñadas para guiar la correa serpentina de manera eficiente. Si una polea se desalinea, puede provocar un desgaste irregular de la correa, reducir su eficiencia y, en última instancia, causar su fallo.
- Rodamientos defectuosos en el tensor, polea loca, o incluso en un accesorio impulsado por la correa de accesorios: los rodamientos defectuosos pueden generar fricción extra y desalineación, lo que puede causar que la correa se deslice o se rompa. Además, los rodamientos defectuosos en los accesorios del motor pueden provocar un funcionamiento incorrecto de estos sistemas.
¿Qué son la ‘polea loca’ y el tensor de la correa?
La polea loca ayuda a crear suficiente ángulo de envoltura para prevenir el deslizamiento de la correa de las otras poleas. Y el tensor de la correa (o tensor automático) proporciona la tensión necesaria para que la correa serpentina funcione de manera óptima.
Por si quedan dudas, este tensor del que hablamos es distinto al tensor de la correa de distribución. La correa de distribución y la de accesorios son diferentes. La primera sincroniza el árbol de levas, mientras que la segunda administra los distintos sistemas que funcionan en conjunto con el motor, como el alternador o la bomba de agua.