La gran mayoría de los automóviles llevan el motor en la parte delantera. Esta es la forma más práctica de construir un vehículo, especialmente a nivel de costes. Sin embargo, no es la única ubicación en la que podemos ver un motor. En muchos deportivos, el propulsor se pone detrás o incluso en la parte central para obtener así mejores prestaciones.
La posición del motor suele estar relacionada con cómo está configurado el resto del vehículo. También tiene mucho que ver con el eje que ejerce la tracción, pues la relación entre la posición del bloque y las ruedas es muy notable. En este artículo hablaremos de todas las posiciones en las que podemos encontrar un motor y cómo afecta tanto al rendimiento como al manejo de la máquina.
Motor delantero: Pros y contras
Los motores montados en la parte delantera son la ubicación de motor más común. Por consiguiente, los coches de tracción delantera también son los más comunes.
Esta ubicación es realmente práctica. El motor delantero es el más fácil de trabajar. Además, colocar el propulsor en la parte delantera permite hacer cabinas más amplias y dejar más espacio para los pasajeros.
Aunque un vehículo con motor delantero puede ser limitado para una conducción alegre, los coches con motor delantero están en desventaja desde el punto de vista del rendimiento que muchos fabricantes de autos de alto rendimiento los reservan para sus modelos de gama baja o los omiten por completo. Los motivos son los siguientes:
- Dificultad para llevar la potencia al eje trasero: en vehículos con tracción trasera como los BMW o tracción total, parte de la potencia y el par del motor se desperdician al tener que llevar el movimiento al eje trasero.
- Peor capacidad de frenada: ya que el peso del coche se desplaza hacia delante cuando el coche desacelera, dándole un impulso extra en la dirección no deseada.
- Desbalance de peso: un motor frontal hace que la mayor parte del peso del vehículo se concentre en la parte delantera. Esto puede hacer que el coche sea menos equilibrado, especialmente a altas velocidades o durante las maniobras rápidas, y puede resultar en una menor capacidad de manejo.
- Tendencia al subviraje y rendimiento limitado en curvas: el mayor peso en el frontal hace que el vehículo tienda a irse de morro. Cuando se hace conducción deportiva, es preferible sufrir el problema contrario (el sobreviraje), ya que se puede compensar con algo de pericia con el volante.
Motor trasero: Ventajas y desventajas
Un motor montado en la parte trasera básicamente significa que el motor se encuentra en lo que consideramos la zona del maletero. Es un diseño popular para coches deportivos porque colocar la fuente de energía detrás del eje trasero aumenta la aceleración y la capacidad de frenado. Como suele ser lógico, estos motores aprovechan su cercanía al eje trasero para dar tracción al eje posterior —o dotar al vehículo de una tracción total—.
La aceleración podría parecer contraintuitiva. Después de todo, el coche esencialmente necesita un gran empujón desde atrás para ponerse en marcha, y ahí es donde se basa todo el peso. Pero ese peso también recae sobre las ruedas traseras, lo que mejora la tracción de los neumáticos.
Debido a la naturaleza del diseño, los coches con motor trasero tienden a ser considerablemente más pequeños que un vehículo de pasajeros promedio. Esa ventaja de tamaño mejorará el manejo también.
Por contra, hay un inconveniente específico en el manejo: los coches con tracción trasera son propensos a un tipo de derrapaje conocido como sobreviraje. El sobreviraje es cuando la parte trasera del coche se desliza fuera de la línea del frente, causando un efecto de coletazo. El sobreviraje puede ser difícil de controlar, especialmente en condiciones climáticas adversas, pero muchos guerreros de pista de fin de semana parecen disfrutar del efecto. No obstante, los pilotos experimentados suelen aprenden a mantenerlo a raya. Este es uno de los motivos por los que se suele decir que los coches con tracción delantera se conducen, y los vehículos con tracción trasera se pilotan.
Motor central. Puntos fuertes y débiles
Los coches de motor central son la configuración menos común de las tres, pero tienen el motor en «la ubicación óptima», según muchos expertos.
En este tipo de coches, el motor se coloca justo delante del eje trasero. Eso se debe a que, además de la proximidad de un motor montado en el medio a las ruedas traseras, este diseño también permite al coche alcanzar una distribución de peso ideal, centro de gravedad y tracción. Cuando el peso del coche está centrado, las ruedas no se desequilibrarán al tener que lidiar con peso extra, y el coche puede ser dirigido con más precisión.
Estos son factores que probablemente el conductor promedio nunca piensa, pero pueden marcar una gran diferencia al pasar por curvas cerradas en una pista.
Por supuesto, no todo son ventajas. Además de que estos coches son los menos comunes, también hay una gran lista de desventajas:
- Espacio interior limitado: los coches con motor central a menudo ofrecen menos espacio interior para los pasajeros y el equipaje. Esto se debe a que el motor, ubicado entre el espacio del habitáculo y el maletero, ocupa una cantidad considerable de espacio.
- Dificultad de acceso al motor: ll motor en un vehículo con motor central puede ser más difícil de acceder para tareas de mantenimiento y reparación. Esto puede aumentar los costos y el tiempo requerido para el mantenimiento del vehículo.
- Calor y ruido: los automóviles con motor central a veces pueden tener problemas con el calor y el ruido del motor, ya que se encuentra más cerca del habitáculo. Esto puede resultar en un viaje menos cómodo para los pasajeros.
- Mayor coste de producción y venta: los vehículos con motor central suelen ser más caros de producir debido a la complejidad adicional del diseño. Esto se traduce en precios de venta más altos, lo que puede ser un factor disuasorio para algunos compradores.
- Menor visibilidad trasera: debido a la ubicación del motor, estos vehículos pueden presentar una visibilidad trasera limitada. Esto puede dificultar las maniobras de aparcamiento y la conducción en marcha atrás.