De los motores TDI se han dicho auténticas barbaridades. Es el precio a pagar cuando uno se salta las normas, aunque sea tirando al máximo de ingenio. Sin embargo, al César lo que es del César. Los motores EA189 son motores exageradamente eficientes si renunciar a la potencia. ¿No te lo crees?
Dieselgate para batir récords de bajo consumo
Nos remontamos a mayo del año 2012. Ha llovido desde entonces —bueno, no tanto, que hay un poco de sequía—. John y Helen Taylor, reconocidos por ser expertos en conducción eficiente, se animaron a batir un récord mundial con un coche diésel, nada más y nada menos que en Estados Unidos.
A bordo de un Volkswagen Passat TDI SE (2012) que estaba completamente de serie, fueron capaces de estirar un depósito de 70 litros durante nada más y nada menos que 2.617 kilómetros (1.626,1 millas). Atravesaron nueve estados de EEUU sin repostar.
El Passat utilizado, como decíamos, no tenía repro ni modificaciones opcionales. Iba equipado con un motor 2.0 TDI Clean Diesel —el chiste se hace solo—, capaz de producir 140 CV y 320 Nm de par. Sobra decir que la pareja utilizó un modelo con transmisión manual de 6 velocidades, que es el secreto que usan todos los expertos que baten este tipo de récords.
¿Cómo lo hicieron?
El viaje, que comenzó el 3 de mayo en Houston, Texas, y terminó el 5 de mayo en Sterling, Virginia, fue monitoreado y validado en todo momento por las validadores. Para asegurar la legitimidad del récord, el tanque de combustible fue sellado al inicio del recorrido, y tanto el velocímetro como el odómetro del Passat fueron también calibrados previamente.
A pesar de que muchos vehículos eléctricos destacan hoy por su eficiencia energética, este récord pone en evidencia el potencial de los motores diésel bien optimizados. No hubo modificaciones en el vehículo, pero los Taylor utilizaron técnicas de «hipermiling», que incluyen mantener una velocidad constante y evitar aceleraciones bruscas.
¡Tampoco fueron a 20 por hora! Condujeron solo durante el día, respetando un límite de 14 horas de conducción diaria, lo que simulaba condiciones reales de tráfico. También metieron peso extra al coche para que la simulación fuera medianamente realista.
Los resultados fueron alucinantes. Batieron el récord anterior, establecido también por otro Passat en Europa, solo que con el motor 1.6 BlueMotion. Con su aventura, los Taylor consiguieron un consumo de 84.1 mpg, equivalente a 2.8 litros por cada 100 kilómetros. Esto son prácticamente 2 litros menos a los 100 de lo que marca la ficha.
La lecutra de todo esto es más que clara. Por muy eficiente que sea un motor, lo que importa de verdad es que la persona que controla la máquina sepa conducir como es debido.