Saber si nuestro coche tiene una distribución por correa o por cadena es importante de cara al mantenimiento del mismo. Normalmente, cuando compramos un coche nuevo, el fabricante nos indicará el calendario de revisiones. Con ese dato, independientemente del sistema que lleve, no deberíamos preocuparnos en exceso. El propio taller oficial nos dará cita cada ciertos kilómetros o años.
Sin embargo, si compramos un coche de segunda mano, el vendedor podría omitir el dato, o simplemente desconocerlo. Con estos pasos que ahora te explicamos aprenderás a identificar si tu coche funciona con un sistema de correa o si por el contrario, dispone de una distribución por cadena de eslabones. No necesitarás ser un experto ni acudir a un profesional de la mecánica
Comprueba el Manual del Vehículo
En primer lugar, lo más sencillo es consultar el manual del vehículo. Rara vez se saca este libro del coche y es extraño que no incluya esta información. En caso de no encontrarlo, puedes buscar el manual de tu vehículo en Internet. El manual del coche es un recurso fundamental que nos puede salvar de más de un apuro. Nos dirá todo lo que necesitamos saber sobre los mantenimientos, cómo configurar el coche en caso de que algo se nos descuadre y nos puede servir para arreglar el vehículo durante un improvisto. Si no lo tienes en mano, descárgalo en PDF y llévalo siempre en el móvil.
Identificación Visual
Si no logramos encontrar en el libreto el sistema de distribución de nuestro automóvil, podemos proceder a la identificación visual. Comenzaremos abriendo el capó de nuestro vehículo e identificando si el motor está colocado de forma longitudinal o transversal al eje central del automóvil. Todo esto, mirando al coche de frente. En motores dispuestos de forma longitudinal, lo habitual es que la distribución esté justo en el frente del motor, y suele ser bastante sencillo de ver. Por otro lado, si la colocación es transversal, la correa o cadena suele colocarse en el lado izquierdo del motor.
Otro truco es examinar la cubierta del lado del motor. Si existe una carcasa de plástico o de hojalata justo en el lado que hemos mencionado en el párrafo anterior, lo habitual es que el motor funcione con correa. Esto se debe a que la correa se suele proteger de la suciedad como el barro o la gravilla. Simplemente levantando la cubierta de plástico debería verse la correa. Los motores que funcionan con cadena la llevan integrada en el bloque motor. No suelen existir cubiertas como tal. La cadena es un poco más complicada de ver a simple vista, por lo que habitualmente se suele identificar una cadena de distribución por descarte. Si no hay tapa y no se ve la correa, lo normal es que el coche funcione mediante cadena.
Comprueba nuestro Listado
Pero no siempre vamos a poder mirar al interior de nuestro capó e identificar los distintos componentes del coche. En vehículos modernos viene siendo habitual colocar plásticos y tapas para hacer el conjunto más estético e impedir al usuario acceder a ciertas partes del sistema. Si esto ocurriera, deberíamos buscar por marca, modelo e identificador del motor de nuestro coche. Estos datos son más que suficientes para hacer una búsqueda y saber si nuestro vehículo funciona con una distribución por correa o por cadena.
En nuestra web tienes un enorme listado por marcas y modelos. Disponemos de una lista muy completa de motores por modelo, distribución, potencia y año. Gracias a él, podrás comprobar rápidamente si tu coche o el coche que quieres comprar funciona con correa o con cadena.
Listado de Coches por Marca, Motor y Distribución
Más Información sobre la Distribución
Una vez sepas el dato, aquí te mostramos la ventajas e inconvenientes de cada uno de estos sistemas: