Los neumáticos de perfil bajo, también conocidos como neumáticos de sección baja, son aquellos que tienen los flancos más estrechos y bajos en comparación con su anchura. Este tipo de neumáticos se han puesto muy de moda en los últimos años por su look deportivo. Suelen venir ya de serie en numerosas berlinas y vehículos deportivos. Pero ¿son realmente más propensos a sufrir pinchazos? ¿O es una leyenda urbana? En estas líneas arrojaremos un poco de luz sobre este tema, hablando principalmente de las diferencias que tienen estas gomas respecto a un neumático con un perfil más ancho.
Menor protección en los flancos
La principal desventaja de los neumáticos de perfil bajo es que, al tener los flancos más estrechos, estos quedan más expuestos a posibles daños procedentes del exterior, como pueden ser los baches, el roce con la calzada en curvas cerradas o el subirse a la acera.
Un flanco dañado tiene mucho más riesgo de pincharse que uno intacto. Además, este tipo de pinchazos son, en ocasiones, imposibles de reparar. Por lo tanto, los expertos recomiendan extremar las precauciones al circular con neumáticos de perfil bajo para evitar posibles pinchazos.
Mayor rigidez y menor absorción de impactos
Otro factor que incrementa el riesgo de pinchazos es que los neumáticos de perfil bajo, al tener menos altura de caucho, suelen ser más rígidos y absorben peor las irregularidades del firme. Esto provoca que los baches y demás imperfecciones del asfalto se transmitan con más fuerza al interior del neumático, facilitando que se produzcan pequeños daños internos que derivan en un pinchazo.
Más susceptibles a «pellizcarse» en baches
Los expertos también advierten que la combinación de flancos estrechos, mayor rigidez y peor absorción de impactos hace más probable que el neumático de perfil bajo se «pellizque» o dañe al pasar por encima de un bache. Este efecto de «pellizco» consiste en que el neumático no llega a absorber completamente la deformidad del terreno, por lo que sus flancos entran en contacto entre sí, pudiendo llegar incluso a rozarse. Esto a menudo causa pequeñas rasgaduras por las que se desinfla el neumático.
En definitiva, los expertos recomiendan tomar ciertas precauciones adicionales al usar neumáticos de perfil bajo, sobre todo vigilar la presión de inflado, evitar baches y conducción agresiva, así como revisar frecuentemente que los flancos no presenten daños. Un correcto mantenimiento y conducción suave y precavida son claves para alargar la vida útil de estos neumáticos y reducir pinchazos. Aun así, por diseño siempre serán más propensos a este tipo de daños que un neumático con flancos de mayor altura.
